Wednesday, February 07, 2007

Engaño

Pudo haber sido la luz reflejada en tus ojos aquella noche estrellada, o tu cálida sonrisa o tus besos apasionados lo que me enamoró, pero no, fue tu labia que lentamente me envolvió hasta quedar adormecida entre tus brazos. Ahora que no estás la maldigo, porque logró mantenerme dentro de tu red, tejida por engaños que hoy son como la herida de una puñalada que molesta y no deja vivir en paz.